martes, 3 de diciembre de 2013

Re: ¿Cómo vivían los trabajadores del Antiguo Egipto?

este trabajo es de Yolanda González Morales


El 3 de diciembre de 2013 19:56, Yolanda González Morales <yolayalex@gmail.com> escribió:

La vida de los trabajadores que construyeron las grandes pirámides desde una perspectiva objectiva y libre de prejuicos.


   El Antiguo Egipto ha fascinado durante milenios a los pueblos que han tomado contacto con él, desde Grecia y Roma hasta, en el momento presente, toda la Humanidad. Su arte, sus imponentes y duraderas construcciones, su magia, etc., despiertan cada vez más interés debido a que no tenemos unas explicaciones definitivas de su naturaleza. Pero los amantes del Egipto Faraónico siempre han tenido una espina clavada en la conciencia: ¡cómo puede ser que este pueblo tan maravilloso albergara la esclavitud!

Afortunadamente para ellos y para todos los estudiosos de la Historia, en las últimas décadas se han verificado una serie de hallazgos arqueológicos que están echando por tierra la hipótesis (que se habían convertido en dogma) de que los obreros en el Antiguo Egipto eran en su mayoría esclavos.

Por un lado, ya se conocía desde hace tiempo la existencia de la cofradía de artesanos del Valle de los Reyes, pero no hace tanto que nos hemos enterado de cómo vivían, y nada más lejos de la esclavitud que el nivel de vida en Deir-el-Medina, el Lugar de Verdad, como traducen algunos el verdadero nombre de la aldea de los artesanos depositarios de los secretos de la Morada del Oro.

Los trabajadores de las necrópolis reales percibían su salario en especies. Las cantidades percibidas estaban en relación con su categoría laboral y se cobraba el 28 de cada mes, excepto los bienes más perecederos que se percibían cada semana o 10 días. Haciendo las cuentas y adaptándolas al día de hoy, su nivel de vida era ¡medio-alto!

Tenían numerosísimas fiestas laborales, muchas más que nosotros, que dedicaban a atender su casa, a las ceremonias religiosas y al ocio, sobre todo, a la música, la danza y la narración de cuentos.

Disfrutaban de atención médica especializada y de los consiguientes permisos de trabajo. Si surgía algún problema contaban con la debida asistencia jurídica y, al finalizar su servicio como artesanos activos, eran protegidos por lo que hoy llamaríamos la pensión de jubilación.

En las cercanías del Valle de los Reyes vivían los constructores de sus mastabas. Y en noviembre de 2.001 en las cercanías de las pirámides de la llanura de Gizeh, se han realizado unos descubrimientos muy interesantes: los sarcófagos de los constructores de las pirámides por parte de Zahi Hawass y la aldea donde vivieron por Mark Lehner. Los datos recabados por estos arqueólogos egipcios contradicen la creencia tan arraigada en Hollywood de que fueron cientos de miles de esclavos los artífices de las pirámides. Por lo tanto, los que levantaron las colosales pirámides, mientras no se encuentren otros datos más concluyentes, no fueron esclavos, sino trabajadores cualificados que creían en lo que hacían y amaban su trabajo, que fueron capaces de construir esas maravillas de la Antigüedad en tan sólo 80 años. Y se supone que vivían tan bien como sus colegas del Lugar de Verdad.

Todavía nos asombra más el enigmático Egipto. ¿Con qué nos sorprenderá en las próximos años?




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